El Consejo Regulador de las IGP Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla muestra su apoyo público a los productores y envasadores de aceituna negra española ante el último fallo judicial de Estados Unidos del 23 de septiembre a favor de la imposición del arancel del 35% sobre este producto desde 2018. Un hecho que vuelve a cuestionar la legalidad de las ayudas de la PAC a la agricultura de la Unión Europea.

A diferencia del resultado de las sentencias provisionales anteriores, en las que la Aceituna Verde de Mesa se quedó exenta de este impuesto, el juez ha resuelto a favor del Departamento de Comercio de EE.UU. aludiendo que actuó de manera correcta de acuerdo con las leyes de este país, y considerando que las subvenciones de la Política Agraria Común (PAC) incumplen la normativa de la Organización Mundial del Comercio (OMC), ignorando la última resolución del organismo común en este terreno.

El origen de este arancel data de 2018, momento en el que EE.UU. estima que la aceituna negra de mesa se vende por debajo de su precio de mercado gracias a las subvenciones agrícolas. En desacuerdo, la patronal española eleva a 170 millones de euros de pérdidas ocasionadas por el arancel y reclama ayudas compensatorias.

Cabe recordar que Estados Unidos continúa siendo el principal importador de las aceitunas españolas, sin embargo, este arancel impuesto ha puesto en desventaja comercial a España frente a otros países productores. Desde la Asociación Española de Exportadores e Industriales de la Aceituna de Mesa (Asemesa) advierten que “este impuesto mantiene la amenaza sobre cualquier producto europeo que se exporte a EE.UU, ya que podría verse involucrado en una investigación similar debido a las ayudas de la PAC”.