Entre octubre de 2016 y enero de 2017 las ventas de aceite de oliva han llegado a 106,9 millones de litros, que son 10,7 millones de litros menos de los que se vendieron en los cuatro primeros meses de la campaña anterior. Así lo refleja el último informe de la Asociación Nacional de Industriales, Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles, Anierac.

Dicha información refleja que el descenso se debe sobre todo a la disminución de las ventas de las categorías suave e intenso mientras que las ventas de virgen y virgen extra, aunque también algo más bajas, son muy similares a las de la campaña anterior.

Concretamente en el mes de enero las ventas en el mercado interior de aceite de oliva sumaron 24,15 millones de litros. Las cifras del virgen extra y del suave han coincidido situándose en 8,3 millones de litros. Del virgen salieron 3,5 millones de litros y 4 millones de intenso. A nivel general, en el primer mes de 2017 se vendieron 51,5 millones de litros de aceites comestibles.

En cuanto al aceite de orujo de oliva, Anierac señala que en enero salieron 1,73 millones de litros. Las ventas acumuladas de esta categoría en esta campaña ascienden a 6,4 millones de litros, un 10,62% más que las que se vendieron en el mismo período de la campaña anterior.

De los aceites de semillas salieron 25,78 millones de litros, de los que 22,5 millones fueron de refinado de girasol, casi tres millones de litros del refinado de semillas y el resto cantidades menores de maíz, soja y otros aceites refinados de semillas. La suma de las ventas del último año móvil (689,38 millones de litros) es muy similar a la cifra correspondiente al año móvil inmediatamente anterior (687,91 millones de litros), aunque tiene un comportamiento positivo que supone un incremento del 0,21%.