Revista
Esta última semana de enero el mercado oleícola está dividido entre los que han operado poco, como Córdoba y Jaén, y entre los que han tenido más movimiento, como ha sido el caso de Granada. Concretamente los productores jiennenses están preocupados por la climatología, mientras que los envasadores se preocupan por las ventas. En este caso, la toma de decisiones depende de muchos, y la prudencia es tensa.
En Córdoba el mercado está comprimido, sigue el cisterneo y las operaciones son cortas, con calma tensa. En Granada, por su parte, el movimiento es mayor, Migasa ha salido a comprar y detrás han llegado otros. En este mercado no queda lampante y su precio sigue subiendo. En Sevilla se compra lo necesario y están a la espera de los datos consolidados de producción de enero. Y el mercado riojano está mantenido, con pocos movimientos y poca demanda. Puede consultar todos los precios actualizados en la web de Oleo