24 millones de euros en pérdidas directas. Estos son los costes que la borrasca Gloria ha dejado a su paso por la Comunidad Valenciana, según ha informado Unió de Llauradors en su primera estimación. El viento y el granizo han sido las causas principales que han afectado a numerosas zonas del territorio valenciano.

La borrasca ha tenido especial incidencia en la zona de la Ribera Alta y Baixa, dañando no solo cultivos sino infraestructuras agrarias como invernaderos, caminos, naves, sistemas de riego, mataderos o granjas. El cultivo de cítricos es el más afectado pues se ha dañado entre un 20 y un 25% de la cosecha pendiente de recolectar, lo cual supone unas pérdidas aproximadas de 17 millones de euros. Tras este cultivo, las hortalizas de invierno han sido las más afectadas, especialmente alcachofas, coles, patatas y cebollas, debido al pedrisco y la asfixia por inundación. Estas pérdidas se cifran en 2,5 millones de euros. El resto de pérdidas se da en otros cultivos también afectados como los viveros de plantas vivas y ornamentales o el aguacate, entre otros.

No obstante, el temporal de lluvias ha tenido un efecto positivo en cultivos de secano, tales como el olivar, que han servido para limpiar los árboles ante posibles plagas o enfermedades y acumular, así mismo, las horas necesarias de frío para su correcta evolución en esta fase del año.

Con respecto a los agricultores afectados, Unió ha pedido que se conceda un paquete de subvenciones para las infraestructuras agrarias dañadas, además de ayudas y exenciones fiscales y de la seguridad social.