El Servicio de Sanidad Vegetal del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural (DACC) de la Gereralitat de Catalunya ha actualizado la hoja informativa de la lucha contra la mosca del olivo (Bactrocera oleae) y el listado de productos fitosanitarios autorizados, en el que figuran insecticidas (adulticidas y larvicidas), medios de captura masiva, técnica de atracción y muerte y productos repelentes como el caolín.

La mosca del olivo es un díptero de la familia Trypetidae que causa pérdidas en la producción y posteriormente en la calidad del aceite, provocando la caída prematura de los frutos del árbol. Los daños directos vienen provocados ​por la actividad alimenticia de las larvas, que pueden dar lugar a unas pérdidas del 2-5% de la producción de aceite. También produce daños indirectos, causados ​​por actividades fúngicas que incrementan la tasa de peróxidos y de la acidez del aceite. El momento en que pica la aceituna para hacer la puesta y la severidad del ataque dependen de factores climáticos, meteorológicos, agronómicos, de la biología de la mosca y de la sensibilidad varietal del olivo.

Para su control, hay que seguir las recomendaciones de las Estaciones de Avisos fitosanitarios del Servicios de Sanidad Vegetal y el personal técnico de las Agrupaciones de Defensa Vegetal (ADV).

Para conseguir un elevado grado de protección contra la mosca del olivo se deben seguir los principios que marca la Gestión Integrada de Plagas y las recomendaciones de IRAC en cuanto a la prevención de resistencias.