Anna Cane, gerente de la compañía Carapelli Florence, ha revalidado su mandato como presidenta de Assitol, la asociación italiana de la industria del aceite de oliva. La presidenta fue escogida en por unanimidad en asamblea, en una votación que también confirmo a Riccardo Cassetta, director de Biolevante, como vicepresidente de la asociación por segundo mandato consecutivo.

La presidenta ha agradecido la confianza depositada en ella, destacando que "no es frecuente ver a hombres y mujeres en igualdad de condiciones en los altos puestos directivos". En ese sentido, ha querido reivindicar su labor en pos de un diálogo "lo más inclusivo posible con todos los actores de la cadena de suministro y las instituciones". Los objetivos pasan, dice, por aumentar el conocimiento medio del aceite de oliva entre los italianos y evitar la banalización del producto.

La asamblea también sirvió para poner sobre la mesa los proyectos de investigación en los cuales Assistol colabora, como el proyecto europeo Oleum, coordinado por la Universidad de Bolonia. Con respecto a dicho proyecto, Anna Cane dijo que "el análisis sensorial sigue siendo esencial, pero es necesario consolidarlo agregando nuevas herramientas analíticas". Nuevas herramientas que deben servir a su favor en la batalla contra el bajo precio del aceite, una tendencia que se repite en todos los países del mundo y que en Italia también empieza a suponer un problema para el sector.