Revista
De nuevo el sector productor y envasador de aceite de oliva vuelven a tener noticias más que positivas y tranquilizadoras para esta campaña. El consumo doméstico de aceite de oliva se ha recuperado de manera importante en el primer trimestre de este año, hasta alcanzar los 83 millones de litros; lo que significa que la demanda se ha incrementado por término medio en un 8,5% en el periodo enero/marzo de este año.
En el análisis del conjunto de todos los aceites que analiza el Panel de Consumo de la Dirección General de Alimentación cabe destacar que, a excepción del aceite de girasol, el resto de las calidades de aceite de oliva han mostrado un buen comportamiento en cuanto a los volúmenes vendidos, aunque no así en el valor del aceite, consecuencia de la bajada de precios en origen y que ha trasladado al consumidor el industrial envasador.
Por otra parte, las estadísticas del Ministerio de Agricultura muestran una vez más que el consumidor español está descubriendo las bondades de los aceites vírgenes, que en éste trimestre muestra un incremento de las ventas cercano al 30%, por lo que su consumo puede seguir creciendo en los próximos años.
El dato más negativo lo pone en esta ocasión la bajada de las ventas de aceite de girasol, con un descenso del –11,35% en volumen y un –13,61% en valor.