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Oleo Digital.- Aceitera Martínez, la empresa que Agustín Vicente Martínez fundó en Echesortu (Argentina) hace 60 años, se prepara para dar el gran salto. De la mano de Damián y Paula Martínez, los nietos del emprendedor, la empresa tiene en marcha un ambicioso plan de expansión.
Concretamente, en abril del 2009 trasladarán su planta de Rosario a un terreno de cuatro hectáreas junto a la refinería de Bunge en San Jerónimo Sur donde podrán duplicar su actual producción.
Aceitera Martínez es una envasadora de aceite de marca blanca y cuenta con dos marcas propias: Alsamar (oliva y girasol) y Siglo de Oro (mezcla) que se comercializan en Argentina y en otros países.
Para garantizarse la disponibilidad de aceite la firma Martinez ha firmado un acuerdo con Bunge por el que la multinacional cede a la primera un terreno de 4 hectáreas donde se instalarán la nueva planta de envasado por un periodo de 25 años. De tal forma que Bunge se garantiza mayores volumenes de envasados. Concretamente, la planta de San Jerónimo Sur, de 8 mil metros cuadrados, tendrá capacidad para producir 12 mil toneladas mensuales, exactamente el doble de lo que hoy embotellan.
Además, la cercanía con Bunge les permitirá mejorar la logística, puesto que contemplan la instalación de una cañería especial entre una planta y la otra para que el aceite vaya directamente del tanque de refinamiento de la multinacional a los tanques de almacenamiento de la aceitera rosarina.
Con el nuevo volumen de producción, el presidente de la aceitera Martinez quiere continuar su expansión en Chile, donde son los principales exportadores de aceite envasado y por el otro relanzar la marca insignia de la firma: Alsamar. “Queremos recuperar el mercado interno que hoy sólo representa el 20% de la producción”, destacó. El 70% lo exportan a Chile y el resto a otras plazas como Angola, donde hay buen mercado porque se consume mucho aceite pero no hay envasadoras locales, más Panamá y Colombia.