Manzano ha ampliado su capacidad de producción con la construcción de una nueva fábrica en Villafranca de Córdoba. En 1918, su fundador estableció las bases de lo que hoy es una empresa consolidada en la localidad cordobesa de Bujalance. Con 105 años de historia, Manzano emplea a 80 trabajadores, supera una facturación de 13 millones de euros anuales y exporta sus productos a más de 20 países. Sin embargo, desde 2014, sus depósitos de acero inoxidable se fabrican en Villafranca de Córdoba, a 15 minutos de su sede social, por cuestiones logísticas.

La inversión realizada en 2014 para deslocalizar esta línea de negocio ascendió a aproximadamente un millón de euros. Desde entonces, se han fabricado más de 2.000 depósitos de acero inoxidable al año, con capacidades que van desde unos 2.000 litros hasta casi 200 toneladas de aceite de oliva.

La demanda creciente de sus clientes ha llevado a la necesidad de ampliar sus instalaciones. Por ello, Manzano está contuyendo una nueva fábrica en la misma zona industrial de Villafranca de Córdoba. La inversión total superará los 2,5 millones de euros e incluirá una edificación para producción de unos 2.200 m2 y más de 20 metros de altura, así como 8.000 m2 de zonas exteriores para circulación y acopio de producto terminado, y otros 1.600 m2 para otros usos.

La nueva fábrica, cuya inauguración y puesta en producción se estima en la primavera de 2024, permitirá a Manzano aumentar su producción máxima en alrededor del 60% anual. Además, facilitará la fabricación de depósitos aún más altos que los actuales, respondiendo así a la creciente demanda del sector por depósitos de mayor tamaño.

Desde su fundación, Manzano ha exportado sus bodegas a países como Portugal, Túnez, Marruecos, EE. UU., Bulgaria, Guatemala, Kenia o Canadá. La construcción de la nueva fábrica también permitirá satisfacer la demanda creciente de "muñecas rusas", packs de depósitos con diámetros muy parecidos, que ahora podrán fabricarse en tamaños aún mayores.