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Oleo Digital.- La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha asegurado que la política de agua en España durante 2009 se ha caracterizado por la ausencia de "soluciones consensuadas" frente a la subida de las tarifas eléctricas, que "registrarán incrementos" a partir de enero de 2010.
En este contexto responsables de Fenacore consideran que el campo español ha estado en crisis durante 2009 debido a la caída del precio de los productos agrarios y al incremento de las tarifas eléctricas para el regadío, que ha cuantificado en un 90 ciento respecto a 2008, lo que, en su opinión, "está poniendo en peligro la viabilidad de las explotaciones ya modernizadas".
Por el contrario, los regantes "reconocen la voluntad del Ejecutivo para aliviar las pérdidas económicas derivadas de la falta de lluvias" sufrida por el campo hasta casi finales de año, aunque ha matizado que "no se ha avanzado apenas en la modernización de las más de un millón de hectáreas que todavía utilizan sistemas de riego tradicionales".
Sin embargo, desde Fenacore se considera positivo la contribución del Ejecutivo para "aliviar" las pérdidas de las cuencas que, hasta las últimas lluvias de diciembre, se han visto más afectadas por la falta de agua y "la inversión de más de 611 millones de euros que el Gobierno destinará a la ejecución de obras urgentes de modernización de regadíos".
Respecto a las demandas del sector durante este año, ha recordado que el campo se movilizó para pedir la aplicación de un IVA reducido y han lamentado que los regantes no fueran convocados al encuentro de las organizaciones agrarias y del Ejecutivo "para buscar soluciones" frente a las nuevas tarifas eléctricas.
En su balance de 2009, ha indicado que "ha quedado pendiente" y "sin respuesta clara" el acceso a la producción de energías renovables y la segunda fase del proceso de modernización de regadíos "Horizonte 2015", que contempla transformar un millón de hectáreas.
No obstante, han advertido de que la "territorialización" de la gestión de las aguas que han "asumido" algunas comunidades autónomas mediante la reforma de sus Estatutos, puede derivar en 2010 en un modelo autonómico "insolidario" y provocar "guerras del agua" entre territorios y regantes.
En cuanto a los retos del regadío para 2010, la mejora de las infraestructuras a través de la construcción "sostenible" de embalses y trasvases entre cuencas, la cesión de derechos al uso privativo del agua, la desalación, la gestión conjunta de aguas superficiales y subterráneas, la recarga de acuíferos y la reutilización de aguas regeneradas urbanas.